Al reseñar la supuesta conspiración que también protagonizan Wanda Vázquez, exgobernadora de Puerto Rico, y otros acusados, la publicación analizó los donativos políticos del banquero en Londres, donde dice ser ciudadano italiano.

Mientras para el 2019, en Puerto Rico, comenzaba a tirar los hilos para apoyar financieramente la aspiración política de la exgobernadora Wanda Vázquez Garced con tal de doblegar a la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF), según la acusación de un gran jurado federal, en el Reino Unido, el banquero Julio Herrera Velutini se convirtió en un importante donante del exprimer ministro Boris Johnson y el Partido Conservador británico, según The Financial Times.

De acuerdo con la publicación financiera, desde que Johnson llegó al 10 de Downing Street -la residencia del Primer Ministro en el Reino Unido- hacia el 2019, Herrera Velutini ha donado más de medio millón de libras esterlinas, o unos $600,000, incluyendo en esa cifra una aportación de unos $120,000 días antes de la elección general.

Los donativos de Herrera Velutini al partido de los llamados “Tories” en inglés se hicieron a través de Britannia Financial Group, un conglomerado de servicios financieros que ofrece servicios de gestión de caudales o patrimonios y tráfico de valores, entre otros.

Herrera Velutini tiene ciudadanía italiana

El Nuevo Día examinó los registros corporativos del Reino Unido y confirmó que Herrera Velutini estableció el conglomerado en el 2016 bajo el nombre Helvetica Financial Group. Dos años más tarde, la firma propiedad del venezolano, cambió de nombre a Britannia Financial.

Si bien Herrera Velutini habría nacido en Venezuela en diciembre de 1971 y desde hace unos seis años tendría residencia principal en Londres, en los registros corporativos de Britannia, se indica que el hombre es economista de profesión y ciudadano italiano.

El 11 de mayo, Herrera Velutini dejó su puesto como directivo de Britannia Financial, denota el expediente del conglomerado en el que también otros familiares del venezolano son directivos. Entre estos, Julio César y José Francisco Herrera.

La salida del banquero de Britannia coincide con el momento en que, en Puerto Rico, comenzaba a desvelarse la supuesta conspiración que este orquestó junto a Vázquez Garced y el exagente federal Mark T. Rossini e involucró a John Blakeman y Frances M. Díaz Fosse para controlar los procesos regulatorios en la OCIF.

Patrón de sobornos

En síntesis, un gran jurado federal alega que los acusados -con ayuda de un inversionista residente en Puerto Rico e integrantes del equipo de Vázquez Garced mientras ocupaba La Fortaleza- entraron en un patrón de sobornos. En ese ardid, el banquero pagaría por los servicios de un consultor político para la exgobernadora y a cambio, se nombraría como jefe de la OCIF a una persona recomendada por Herrera Velutini, con el objetivo de cambiar la reglamentación que rige a las Entidades Bancarias Internacionales (EBI) en Puerto Rico.

Sobre todo, indica la acusación, el banquero venezolano buscaba librar a Bancrédito International Bank & Trust, entidad que fundó en 2009, de las medidas correctivas que requería la OCIF para subsanar múltiples deficiencias operacionales, e impedir la divulgación de transacciones sospechosas por lavado de dinero a autoridades federales.

El mismo día en que el Departamento de Justicia de Estados Unidos develó la acusación, Herrera Velutini renunció a la presidencia de los directivos de Bancrédito.

En ese día, el ministerio público arrestó a Vázquez Garced, mientras se indicó que comenzaría los trámites para la extradición de Herrera Velutini, quien se entiende reside en Londres, y Rossini, que según las autoridades radica en España.

Auspiciador del jubileo de la Reina Isabel II

Según Financial Times, Britannia Financial figuró entre los auspiciadores del concierto que se celebró en el Reino Unido con motivo del 70 aniversario de la ascensión de Isabel II al trono británico.

La publicación financiera detalla que las acusaciones contra Herrera Velutini han puesto presión adicional al Partido Conservador británico, que se encuentra en un proceso primarista para definir quién será el sucesor de Johnson y cuyas estrategias de recaudación de fondos están en manos de Ben Elliot.

Johnson, figura clave para promover la salida del Reino Unido de la Unión Europea o el llamado Brexit, renunció el 7 de julio luego de varias controversias y en especial, por el llamado “Partygate”, un escándalo en el que se señala a Johnson por haber promovido y celebrado múltiples reuniones y fiestas en la residencia de gobierno mientras se aplicaban medidas restrictivas a la población en aras de evitar el avance del covid-19 en ese país.

De acuerdo con la publicación, William Benjamin (Ben) Elliot, copresidente y recaudador del Partido Conservador británico, habría allegado a ese colectividad, donativos de quienes fueron sus clientes en Hawthorn Advisors, una firma de relaciones públicas y consultoría cofundada por Elliot.

Entre los clientes de Elliot en Hawthorn figura o figuraba Britannia Financial Group, a juzgar por varios comunicados de prensa emitidos por la empresa de Herrera Velutini y examinados por El Nuevo Día.

Herrera Velutini ha invertido al menos $500,000 en la política local

De acuerdo con el pliego acusatorio develado el jueves, mientras asistía a la boda del “Individuo C”, celebrada el 4 de enero de 2020, Herrera Velutini aseguró en un mensaje de texto a John Blakeman, entonces colaborador político de la exgobernadora, que contaba con unos $2 millones para su campaña política si accedía a sus reclamos en torno a la OCIF.

Como parte de dicho apoyo financiero, Herrera Velutini pagaría los servicios de una firma de consultoría radicada en el Reino Unido. Ejecutivos de dicha firma, acompañados del banquero venezolano y el también acusado exagente federal Mark T. Rossini se habrían reunido con el “Individuo C”, Vázquez Garced y otros en un hotel del Condado el 28 de febrero de 2020.

En una parte del pliego acusatorio se citan mensajes de texto en los cuales se indica que dichos servicios le costarían al banquero unos $500,000. Pero en otros textos enviados por Rossini a ejecutivos de la consultora británica se indica que la contratación de la firma de consultoría requería un pago inicial de unas 250,000 libras esterlinas (£) o unos $300,000. Luego, a partir de marzo, se harían pagos mensuales de unas £200,000 ($240,000) o hasta la celebración de la elección general en noviembre de 2020.

Herrera Velutini, según la acusación, habría hecho el primer pago de manera directa a la consultora y los demás pagos se canalizarían a través de un comité de acción política o SuperPac, cuyo nombre se desconoce.

Conspiración para apoyar la campaña de Wanda Vázquez

El pliego acusatorio alega, en concreto, que Herrera Velutini y Rossini canalizaron dos pagos como parte de la supuesta conspiración para apoyar la campaña de Vázquez Garced: un pago de $315,000 a la firma de consultoría británica y otro por $40,000.

A juzgar por el pliego acusatorio, si Vázquez Garced hubiera ganado la primaria y la firma británica hubiera continuado asesorando a la exgobernadora hasta la elección general, Herrera Velutini habría invertido o ayudado a recaudar alrededor de $1.9 millones a cambio de doblegar al regulador financiero estatal de Puerto Rico.

En 2021, cuando Vázquez Garced no prevaleció en la contienda política, entonces, Herrera Velutini aportó otros $50,000 al SuperPac que favorecía al gobernador Pedro Pierluisi y que las autoridades utilizaron como señuelo para reafirmar la conspiración del banquero.

Dicho de otra forma, según la acusación federal, en concreto, de manera directa o mediante terceros, Herrera Velutini invirtió al menos $400,000 a través de la supuesta conspiración.

Aparte de esa inversión, El Nuevo Día reseñó antes que Herrera Velutini comenzó a hacer donativos a políticos en Puerto Rico desde 2016, justo un año después de que la OCIF comenzó a identificar deficiencias operacionales en Bancrédito.

Según datos de la Comisión Federal de Elecciones, entre 2016 a 2021, Bancrédito Holding, matriz de la EBI y propiedad de Herrera Velutini invirtió otros $125,000, tanto a favor de candidatos a la gobernación del Partido Popular Democrático como el Partido Nuevo Progresista.